Los jubilados y pensionados, y la cada vez más menguada clase media emergen como los grandes perdedores al cumplirse los primeros dos meses del gobierno de Javier Milei.
El ajuste aplicado por el libertario para alcanzar equilibrio fiscal en enero incluyó una devaluación que terminó provocando una disparada de precios que arrasó con el poder adquisitivo de grandes porciones de la población.
La suba de los medicamentos, que llegó al 200% en algunos fármacos, y el alza de la medicina prepaga, que ya acumula más del 60 por ciento, pegaron en la línea de flotación de jubilados y familias.
Las subas de tarifas de electricidad, transporte y otros servicios como la que viene en cuotas de los colegios privados, sumados a la escalada en expensas y alimentos, bebidas y artículos de limpieza están haciendo estragos sobre el poder adquisitivo.
En una entrevista que brindó desde Roma, Milei destacó que su plan de ajuste permitió estabilizar la economía, impidió la hiperinflación y posibilitará a la Argentina volver a ser considerada por inversores y el sector financiero.
Pero el impacto del ajuste provocará una recesión fuerte en el primer trimestre del año, con sectores como la construcción y la industria cayendo por encima del 12 por ciento ya en diciembre, y con un escenario aún más delicado para enero, donde las obras públicas se paralizaron y los despachos de cemento caen en picada.
La fórmula de movilidad vigente desde 2021 y aprobada durante el gobierno anterior, determina para las jubilaciones del sistema general de la Anses un reajuste para marzo que no llegaría al 30%, según especialistas previsionales.
En consecuencia, de no haber una significativa recomposición adicional, los haberes profundizarán fuertemente la pérdida de poder adquisitivo que vienen sufriendo desde hace años.
Ese nivel de reajuste de los ingresos haría, concretamente, que se pierda alrededor de 20% de la capacidad de compra en apenas un trimestre, luego de un año en el que hubo un deterioro de entre 14,2% y 37,4%, dependiendo del monto percibido. Según un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), en términos reales (corregidas las cifras por inflación), en enero el gasto en jubilaciones y pensiones fue un 32,5% más reducido que el destinado a esos pagos en el mismo mes de 2023.
Fuente: NA (José Calero)