Estas tareas están siendo supervisadas por Cristian Oliva, Coordinador del Observatorio Arqueológico y Paleontológico Litoral Sur; y por Lucas Tobio, Coordinador de Museos.«Se comenzó a extraer tierra como parte del trabajo preliminar para después poner la estructura que será el cerco perimetral del fósil para después poder hacer la extracción completa del bloque que quedará encapsulado en una estructura que se diseñó específicamente para ésto por un herrero local. Es un trabajo de ingeniería que nunca se ha hecho en Pringles porque es raro encontrar una situación de estas características. Todo está hecho a medida para esta circunstancia particular», explicó Lucas Tobio.
Agregó que «lo que hicimos hoy (por ayer) fue la etapa grosa, por decirlo de alguna manera, con maquinaria pesada para el zanjeo perimetral. Luego el trabajo se continuó a pala, pico y pincel hasta llegar al fósil. Una vez que se llega al mismo, se colocan los chapones perimetrales y después el trabajo de la máquina para la extracción definitiva».
Después de extraerlo, viene un trabajo de laboratorio más extenso donde se limpia y se refuerza el fósil y se prepara para su posterior investigación y exposición en caso de que pueda ser expuesto.
Recordemos que el descubrimiento ocurrió en febrero de 2020, pero por la pandemia no se pudo seguir avanzando. Luego, en noviembre de 2021, se comenzó a trabajar nuevamente en el sector. En dicha oportunidad, Oliva expresó que «estamos completando las labores de extracción», donde en «febrero 2020 sacamos el cráneo y uno de los brazos del animal».
Oliva también había mencionado que «si bien en líneas generales (el fósil) está completo, el estado de conservación no es el óptimo; habrá que reforzarlo mucho y es peligroso sacarlo por lo que estamos analizando cómo proceder para extraerlo» siendo una de las alternativas «sacar completo el esqueleto con un bochón estructural».
Fuente: El Diario de Pringles