Miguel Valverdi justo se encontraba en la casa de su abuela, domiciliada en Coronel Pringles, y atendió una llamada extraña. Le solicitaban que cambie los dólares porque el banco se los iba a retener, así que se hizo pasar por su abuela, cambiando el tono de voz, convocó a la estafadora a la casa, y allí la detuvo.
“Me dice, ¿Cuántos dólares tenés?, le respondí 3.000, y me pidió que le pase los números de serie de unos billetes. Me dijo que estaba en el banco y que iba a pasar por la casa de mi abuela la secretaria del banco a buscar los dólares: que no se los de a nadie y abra solamente la puerta a X nombre”, refirió Valverdi.
El estafador al teléfono, solicitó que pongan la plata en un sobre, y esperen a la chica del banco, que iba a pasar a retirar el dinero. Tras esperar unos minutos, Miguel escuchó que golpeaban la puerta y se anunciaban con el nombre de la supuesta secretaria del banco.
La mujer, que buscaba concretar la estafa, golpeaba la puerta y decía: “Abuela, salí afuera y dame el sobre”.
Miguel la distrajo unos instantes, le dijo que no podía salir porque era una persona mayor y no podía caminar mucho, y en un momento salió por otra puerta lateral, directo a agarrarla. Y pudo detenerla dando aviso a sus colegas.
La mujer se movilizaba en un taxi de la ciudad, y el chofer del mismo indicó que esta señora lo había contratado para ir a buscarla a la terminal el día anterior, alojarla en un hotel céntrico, y luego llevarla a este domicilio, de la abuela, para buscar unos documentos.
La mujer, que quedó aprehendida, es nacida en Santiago del Estero, y residente en Buenos Aires. “Es la segunda vez que le pasa a mi abuela, menos mal que estaba yo” relata.
Fuente: El Orden de Pringles