En declaraciones a AM 750, la funcionaria remarcó que “tenemos un plan avanzado de vacunación”, que permitió “que no haya un crecimiento en hospitalizaciones y muertes. La tensión solo está en el sistema de detección, en los testeos. Por eso, es muy importante sostener los cuidados y vacunarse”.
En tal sentido, apuntó que con la suba de casos y ante el peligro de contagiarse, “la gente se está vacunando más y eso es importante. Muchos no se inocularon o no completaron el esquema porque pensaron que no había riesgo. Eso es otra cuestión, pero la vacuna está disponible”.
La ministra expresó su deseo de que después de Ómicron la pandemia pase a ser una endemia, pese a que “nunca he hecho predicciones”. Puso el ejemplo de Sudáfrica: “Lo que se observa es que los casos bajaron en seis semanas y en Córdoba estamos viendo que está disminuyendo la velocidad de aumento. Si esto empieza a pasar en cada provincia, va a ser una señal interesante”.
En cuanto a la situación epidemiológica en el país, recordó que “siempre dijimos que la pandemia no había terminado y advertimos que, ante el aumento de la circulación de las personas, aunque estemos con una tasa de vacunación muy alta, podrían aumentar los contagios porque la cepa Ómicron es muy transmisible”.
Consideró que ómicron significó “algo disruptivo”, que la variante surgió “en medio del aumento de la vacunación y nos pone en un escenario distinto que genera muchísima confusión”, lo cual obligó a reformular “todo lo que dijimos hace un mes”. De allí que ahora “los que no tienen indicación, no deben testearse”. Además, valoró que se haya reducido “el período de aislamiento de las personas completamente vacunadas porque tiene un período de incubación y de transmisión más corto”.
En cuanto a posibles restricciones, fue tajante: “Tomar una medida a nivel nacional es muy complicada por el nivel de heterogeneidad del país y por eso las medidas van a ser bien específicas según cada situación epidemiológica de cada jurisdicción y Nación apoyará”.
Fuente: Página 12