Se trata de un sistema de etiquetado de eficiencia energética de vivienda que permita clasificarlas según su grado de eficiencia en el requerimiento global de energía primaria, mediante una “etiqueta de eficiencia energética”, según la Resolución 5/2023 de la Secretaría de Energía, publicada este lunes en el Boletín Oficial.
Para el Poder Ejecutivo, el etiquetado permitirá cuantificar el requerimiento energético de las viviendas de todo el territorio nacional, de manera de poder compararlas entre sí bajo un criterio unificado “y construir una línea de base que sirva de referencia para la elaboración de nuevos programas y el direccionamiento de mecanismos de incentivos, a los fines de mejorar las prestaciones energéticas de las viviendas y reducir el consumo de energía en los hogares”.
Asimismo, se mejoró el “Aplicativo Informático Nacional de Etiquetado de Viviendas”, diseñado para realizar la carga de datos de una vivienda y emitir la Etiqueta de Eficiencia Energética.
La Secretaría de Energía invitó a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a celebrar convenios con la Subsecretaría de Energía Eléctrica para la implementación del PRONEV.
El organismo subrayó que, actualmente, el Aplicativo de Etiquetado de Viviendas cuenta con más de 2.600 usuarios activos y más de 3.400 viviendas analizadas; se han ejecutado ocho experiencias de implementación (pruebas piloto), analizándose a través de éstas un total de 1.357 viviendas en todo el país.
A fines del año pasado, la Subsecretaría de Energía Eléctrica expuso la necesidad de contar con un marco normativo adecuado, que establezca los lineamientos generales del sistema de etiquetado de eficiencia energética, de manera tal de fomentar su implementación en todo el territorio nacional de manera unificada.
En consecuencia, esa Subsecretaría concluyó que la implementación de medidas pasivas y activas de eficiencia energética en el sector residencial, “resulta fundamental”, dado que representa el 27,4% del consumo energético final total del país.
El sector de las construcción en general representó el 37% de las emisiones de CO2 relacionadas con la energía en 2021, “por lo que existe un gran potencial en este sector para la reducción de las emisiones de los gases de efecto invernadero y para la consecución de los compromisos de mitigación y adaptación al cambio climático asumidos por el Estado Nacional”, según la Resolución.
Fuente: Noticias Argentinas