Estuvieron presentes el Subjefe de la Base Naval Puerto Belgrano (BNPB), Capitán de Navío Nicolás Waldo Pérez, acompañado por personal militar y civil del destino. También asistieron familiares de los difuntos e invitados especiales.
En sus palabras, el Capellán Castrense hizo énfasis en el concepto del descanso eterno y del consuelo que debe representar a los familiares el saber que sus seres queridos se encuentran con Dios. Luego se invitó a los presentes a elevar una oración, mientras se realizaba la bendición de cada uno de los nichos.
El Panteón Naval fue construido en 1947 e inicialmente perteneció a la Dirección de Bienestar de la Armada (DIBA). En el 2020 pasó a depender orgánicamente de la Dirección de Bienestar Naval (DIBN) y funcionalmente de la BNPB. Desde entonces se han realizado trabajos de refacción y mantenimiento en techos, ventanales, mampostería, vitreaux, nichos y extractores.
En 2021, durante la pandemia por COVID-19, junto a alumnos del Instituto Centenario se construyó un elevador de féretros que permitió recuperar el acceso a 410 nichos. La capacidad actual es de 1100 nichos, sumados a otros 420 destinados a contener urnas con cenizas. El uso de este espacio es para afiliados a IOSFA y revisten por la Armada Argentina (personal en actividad, retirados y sus familiares a cargo).
El mantenimiento de las instalaciones está a cargo del personal civil y militar dependiente de la BNPB. Según expresó su Jefe, Capitán de Navío Eduardo Mayol, actualmente se encuentran trabajando en la construcción de un montacargas / ascensor que permita no solamente una mejor movilidad de los féretros, sino que también facilite el acceso a los familiares de avanzada edad.
Gaceta Marinera