Más allá de que podría, eventualmente, existir una Causa Robacables II, por los hechos sucedidos la noche del 6 de mayo pasado la investigación está clausurada. Recordemos que todo comenzó con la muerte de cuatro jóvenes que sustraían cables en un campo de la zona de García del Río. Ellos eran Facundo Uribe, Joaquín Acosta, Fernando Gallardo y Federico Strick.
Los sobrevivientes de aquel episodio son quienes hoy están detenido y/o procesados: Daniel Gallardo, alias El Viejo o El Harry; el subcomisario Martín “Cobrecito” Ñancucheo; Emanuel Chamorro, Jhonatan Gutiérrez y Ricardo Gómez.
En la investigación de Zorzano quedó probado que “El Viejo” era el líder de la banda y el policía era quien brindaba la protección para el accionar ilícito. La noche del robo fallido, en el apuro tras el accidente, Ñancucheo olvidó su handy en la camioneta donde se trasladaron los cadáveres y así comenzó su ocaso.
Uno de los datos que sumó la tecnología fueron las conversaciones -vía WhatsApp- entre los protagonistas. Allí queda claro el rol de organizador de Gallardo y la participación del corrupto uniformado.
Veamos.
El mismo día del hecho, es decir el 6 de mayo a las 20.15 Gallardo le manda un audio a Ñancucheo en donde dice que lo están esperando para salir al robo planificado.
“Ey, Martín te estamos esperando acá. Avísame si venís”.
Con anterioridad, un mensaje de uno de los jóvenes que termina falleciendo al subcomisario, le explica que “no están dando los números” y que sería el último robo.
“Martín, Martin. Escúchame, yo estoy yendo a hablar con el viejo porque quiere laburar, no sé si te avisó algo. Igual yo sí voy, no voy a ir a cortar más. Voy a ir a sacar lo ya cortado porque no nos están dando a los números, ¿viste? Igual yo te voy a mantener al tanto cuando llegue allá”.
En otro audio, Gallardo se queja ante otro interlocutor de la coima que debía pagar a Ñancucheo
“Sabes qué pasa, ir a sacar esos pelos no me sale al costo a mí, porque yo tengo que pagar a los milicos y los milicos me están cobrando re caro”.
Otro mensaje revelador, es cuando el subcomisario le pregunta a Gallardo si harían el “trabajo” de ese 6 de mayo:
“Buenas, ¿cómo andás viejito, todo bien? ¿Che al final qué vamos a hacer hoy, vamos a laburar? Avísame así me preparo”.
Como prueba también aparece otro mensaje de audio del policía a Gallardo, en el cual le explica que tiene todo bajo control y le avisa de la presencia de una camioneta roja, que sospecha que los pueden estar vigilando.
“Viejo, si te dicen algo los pibes con respecto a algún movimiento soy yo. Ahora voy a cambiar de ubicación porque anda una chata, una Ford F100 roja dando vueltas. Ya me vio parado en un lugar y ahora volvió de vuelta a pasar, al otro lado. Así que voy a cambiar cerca de donde está el basural. Te aviso por las dudas”.
La causa seguramente será girada a juicio en los próximos días. El fiscal Zorzano, dejó expresamente abierta la posibilidad de que los imputados puedan elegir un “juicio abreviado”.
Para el subcomisario la calificación es la de “robo doblemente agravado por su comisión en despoblado y en banda, y por revestir el imputado la calidad de funcionario policial, en grado de tentativa; en concurso ideal con el delito de peculado de bienes y servicios”.
En el caso de Gallardo, Gutiérrez, Chamorro y Gómez el delito atribuido es el de “robo agravado por su comisión en despoblado y en banda, en grado de tentativa”.
Fuente: La Brújula 24