Al respecto, el titular de Región Sanitaria I, Maximiliano Núñez Fariña, conversó esta mañana con LA BRÚJULA 24 en relación a la necesidad de generar conciencia «La estadística viene mal en todos los años, disminuyendo. Tenemos dos etapas, la primera contempla la vacunación del calendario que está en la libreta y es gratis y por el otro lado las estacionales que se aplican para infecciones respiratorias».
«Empezamos el 1º de enero con la que se liberó para las mujeres embarazadas, la cual le da mayor inmunidad al bebé cuando nazca para la bronquiolitis. Hoy es muy bajo el número de vacunación, pese al esfuerzo de los pediatras de ofrecerlas. Las entidades intermedias y científicas trabajan en tal sentido. En adultos mayores y agentes de salud, la aceptación es buena, pero en los niños pequeños y embarazadas la adhesión es muy baja», apuntó Núñez Fariña, en su charla con el periodista Germán Sasso.
Y agregó que «la inmunización general está disminuyendo y eso hará que en unos años veremos una circulación de virus de los que hoy no se habla. Pasó hace poco y está ocurriendo con el sarampión, hay una decisión social que no entiendo, somos hijos del rigor al creer que si no hay circulación no es necesario vacunarse. Con el Covid, cuando veíamos que se multiplicaban los casos, había colas para aplicarse las dosis. Estamos hablando de enfermedades que han generado un daño muy grande».
«(Nicolás) Kreplak y (Axel) Kicillof han tomado la decisión política de salir a vacunar porque si seguimos así va a ser la misma la cantidad de gente que esté vacunada y la que no lo está. Entre un 15% o 20% por año ha ido bajado la inmunización, más siendo un país que históricamente ha sido pro-vacunación. Se está haciendo todo el trabajo necesario para revertir esto, generando estrategias y mecanismos en los municipios para acercarnos a las familias», explicitó en otro segmento de la nota radial.
No obstante, consultado respecto de la planificación para enfrentar este escenario, infirió que «tenemos gente formada para revertir este tipo de posturas que tanto preocupan. Uno tiene una ideología y un concepto de prevención, seguirá trabajando en virtud de eso, más allá de lo que me pasó cuando atentaron contra el frente de mi casa. Cuando tuvo lugar la inundación del 7 de marzo y vimos cómo estaba el Hospital Penna, la premisa era revertir la posibilidad de que no haya cama, por eso se articuló con los nosocomios públicos y privados».
«Hoy eso ya pasó, los picos de uso de camas se dan entre marzo y abril y ahora luego de las vacaciones de invierno, con los niños que se han juntado en lugares cerrados. Por eso se pide que se abran las ventanas para habilitar la circulación. Hoy no se está llegando al 100% de la ocupación y si eso ocurriera estamos preparados para derivar pacientes a otros distritos, pero no creo que suceda. Quizás haya otro pico a finales de septiembre», recalcó el titular de Región Sanitaria I.
Por último, Núñez Fariña celebró el hecho de que «se liberó la vacunación en Bahía Blanca para gente que no estaba dentro de los criterios iniciales, lo que hace que el virus disminuya en su circulación, eso ayudó mucho además del ir casa por casa para completar las libretas».
Fuente: La Brújula 24